El psicoanálisis no debe retroceder ante temas sensibles para la opinión pública como el abuso infantil. Es un tema que se disfraza con el silencio y la indiferencia social y que sólo resuena en las voces de quienes toman la palabra para romper con este malestar.
El psicoanalista ecuatoriano Alvaro Rendón Chasi con el aval de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (2023) escribe un texto valioso sobre la temática brindando herramientas posibles de intervención en las instituciones educativas de su país pero que bien pueden alcanzar a cualquier ámbito geográfico que se presenta la problemática. Rendón Chasi afirma que el abuso acontece en núcleos intrafamiliares e instituciones escolares. Pero sobre todo, aunque incomode al lector, es indispensable revisar el abuso sexual que se ha considerado desde la psiquiatría, sociología y el ámbito jurídico.
Además considera la situación de violencia que atraviesa un niño, niña o adolescentes. Un film del director Thomas Vinterberg, La celebración (1998) nos recuerda que en una fiesta de cumpleaños número 60 del padre del protagonista , se revela una verdad familiar desagradable. La Universidad Gregoriana de Roma cuenta con un centro especializado en la prevención del abuso sexual brindando atención terapéutica que han atravesado este tipo de violencia sexual.
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El tratamiento que ofrecen no sólo se dirige hacia las víctimas sino también hacia los agresores. Stephen Rossetti, sacerdote y psicólogo que colabora en este centro, en el año 2019 hizo un recorrido para acercarse a la psicología del perpetrador aduciendo que el abuso sexual de niños no es un diagnóstico sino un comportamiento por lo cual un adulto agrede sexualmente a un menor. Cuál sería el motivo que un adulto puede cometer semejante acto aberrante? Muchas son las razones pero la tesis generalizada es el estancamiento del desarrollo psicosexual del adulto quien también sufrió y fue víctima de abuso sexual en la infancia y actúan indiscriminadamente de modo compulsivo.
Rossetti agrega que los abusadores pueden ser muy convincentes, parcialmente porque están convencidos ellos mismos de sus mentiras y distorsiones cognitivas. Por otro lado, y en la teoría psicoanalítica, se considera a la certeza y a las ideas delirantes como un posible fenómeno de la estructura psicótica. La mayoría de las víctimas de abuso han conocido a sus agresores teniendo
una relación cercana cultivada desde hace mucho tiempo. Se menciona que este proceso es conocido como grooming o en su traducción engatusamiento que significa ganar la voluntad de alguien con halagos para conseguir de él o ella, algo.
Dentro de este proceso de grooming se ubican características típicas como dar regalos a los niños o niñas, decirles que la relación es algo especial y que debe mantenerse en secreto, les pueden ofrecer dinero. Se puede llegar a esclarecer que ni los homosexuales ni los sacerdotes muestran mayor disposición a cometer abusos sexuales. Estadísticamente se reportan más abusadores varones que mujeres. La mayoría de los abusadores se identifican como heterosexuales pero en general existe una dificultas de realizar una conexión entre la orientación sexual y el abuso sexual.
Los padres deben enseñar a sus hijos la diferencia entre los buenos secretos (por ejemplo una fiesta sorpresa de cumpleaños) y los malos secretos: aquellos que se suponen que los niños deben guardar por siempre y esconder acciones. Siempre se dice que el mejor momento para hablarle a su hijo sobre abuso sexual es ahora. Los abusos ocurren sin distinción en todos los estratos socioculturales. Alvaro Rendóm Chasi se pregunta algo que nos resuena a todos: cuál es el lugar que los niños ocupan hoy en nuestra cultura? También enuncia algo que resulta vital tener en cuenta. Desde lo social debemos hablar de esta temática puesto que el silencio resulta cómplice de un aparato canalla que puede partir de la vida intrafamiliar hasta coordenadas conocidas por todos.
La línea telefónica 102 opera en 15 jurisdicciones de nuestro país. La línea 0800-222-1717 es un programa de víctimas contra las violencias del Ministerio de Justicia de la Nación.
*Carlos Gustavo Motta es psicoanalista y cineasta.
Publicado en mdz